4/8/08

De ida y vuelta


Vi Benidorm después de un tunel, y una montaña con cabeza de hombre barbudo

Vi un puerto con números y a una niña disfrazada de niña


Vi a dos hombres tirados en la acera y al Papa vestido de guardia civil


Vi a un batería que le brillaba la caja, y a un guitarrista sin cabeza


GANDIA: paraíso de solteros, petados y rockeros,
eso sí, sin tostadas de aceite y jamón.

5 comentarios:

Quacking-pingüino absort-minded visions dijo...

Suena bien.

Je, jeee, me has recordado al discuro final de Blade Runner...

RAFA ANGULO dijo...

la niña disfrazada de niña.. lo mejor.. y además de verdad

Quacking-pingüino absort-minded visions dijo...

Hey, gracias por tu comentario.

A veces se encuentran verdaderas joyas en la basura!

Quacking-pingüino absort-minded visions dijo...

Lo bueno del vacío es que en él cabe todo.

Si se quiere llenar, claro.

Sí, hay deseperaciones dulces como la miel. ¿Has leído a Ciorán? Con él sufrir se antoja algo maravilloso (sin ser estoico). Por eso no le gusta a mi amigo Roberto ("Jo, ese tío se nota que disfruta con el sufrimiento, no sufre!")

Quacking-pingüino absort-minded visions dijo...

Bueno, Pilar, será el puto calor de este verano interminable.

Tai-chi

Je, jee